domingo, 8 de mayo de 2011

¿Cómo analizamos un cuento?

Siempre tenemos que tener en cuenta al receptor (los niños). Una vez que nos hemos leído y visto el libro, tenemos que ver en qué edad/es lo ubicamos.

·         El emisor es el personaje que aparece en el libro y le transmite la información al niño (personaje con el que se puede identificar. En los casos en los que no pueda identificarse, el emisor sería el narrador del libro). Puede ser un emisor neutro, es decir, alguien que cuenta o describe algo que no se presenta ni nada y que el niño, de forma intuitiva, identifica con la persona que ve.

·         El tema tiene que ser algo que le importe de verdad a los niños, es decir, de manera    natural.

·         Existen 2 tipos de estructuras que se usan en los libros infantiles: planteamiento – nudo – desenlace (pueden existir también libros con final abierto, es decir, que los niños dicen el final que quieran) o la estructura acumulativa (hay una sola acción y poco a poco se van acumulando personajes a realizar esa misma acción o sus variantes). La mejor estructura es la que mezcla ambas.

·         El espacio y tiempo deben ser neutros (“había una vez...”) o si es concreto, tiene que ser conocido por los niños.

·         Las ilustraciones no deben ser estereotipadas para que los niños puedan desarrollar su creatividad. Éstas deben secuenciar la historia para que, si el niño coge el libro, pueda seguirla desde donde esté.

·         El lenguaje tiene que ser cercano a los niños, es decir, como ellos se podrían expresar en cada etapa de su vida. También hay que tener en cuenta que, para los niños de infantil, tienen que ser frases cortas y simples. El vocabulario tiene que esta adecuado a la edad a la que se dirige. El libro será mejor si el libro está escrito de forma literaria, con un lenguaje estético.

·         Los valores y contravalores hacen referencia a los aspectos positivos y negativos de los personajes que aparecen en los libros.

1 comentario: